Este año vamos a celebrar el primer Año Internacional del Vidrio de la ONU, un evento que ha sido largamente esperado.
Los humanos utilizaron por primera vez este increíble material en forma de utensilios de obsidiana durante la Edad de Piedra. La fabricación de vidrio real tiene al menos 6000 años, mucho antes de que se fundiera el hierro por primera vez.
En vista que la artesanía a pequeña escala dominó hasta mediados del siglo XX, el vidrio arquitectónico siguió siendo poco común hasta la próxima gran innovación: la producción del vidrio flotado. Este avance condujo a un aumento drástico en el uso del vidrio en todo el mundo.
La primera línea de vidrio flotado de Guardian se puso en marcha en 1970 y, tras décadas de innovación, su vidrio de rendimiento en la actualidad puede ayudar a su diseño a controlar la energía solar, mejorar la seguridad y mejorar la eficiencia energética mientras que maximiza la luz natural, todo en una enorme gama de colores y acabados.
También es un componente fundamental del diseño y la construcción sostenibles, que ayuda a mejorar la eficiencia energética y a reducir el consumo energético. Ofrece una gran flexibilidad para ayudar a alcanzar los objetivos de sostenibilidad de nuestros clientes, incluido su uso en la renovación de edificios existentes. Además, la presencia de producción global de Guardian permite a los clientes obtener material localmente, reduciendo las millas marítimas y de carretera.
También hay una comprensión cada vez mayor de los beneficios que el vidrio puede aportar en términos de bienestar, productividad y salud mental a aquellos que viven y trabajan en los edificios construidos. La nuevas investigaciones develan más en este campo constantemente, y Guardian anhela explorar con los asociados la manera en que podamos hacer más.
Con el vidrio, se puede lograr bastante. Para celebrar el Año Internacional del Vidrio de la ONU, nos gustaría llevarle a hacer un breve recorrido por algunas de nuestras estructuras de vidrio más revolucionarias, para See What’s Possible™ (Ver qué es posible).
Imagine crear una sala de conciertos completa con espejos, el edificio con espejos más grande del mundo, en solo unos meses. Con una superficie de 9740 metros cuadrados y capaz de soportar el calor abrasador, tormentas de arena y, en ocasiones, lluvia. Se llama la sala de conciertos de Maraya y no es un espejismo: trabajando en estrecha colaboración con los socios del proyecto, Guardian ayudó a hacerla realidad.
El Guardian construyó esta hermosa casa con paredes de vidrio en medio del desierto de Gorafe, al sur de España, para demostrar la efectividad de su vidrio. Aquí las temperaturas oscilaron entre 113 °F (45 °C) durante el día y 14 °F (-10 °C) por la noche. Al utilizar una combinación cuidadosamente pensada de formulaciones de vidrio, junto con el aire acondicionado accionado por energía solar, fue posible regular los cambios de temperatura de hasta 30 grados.
La tarea de Guardian aquí era crear una visión segura y clara desde la plataforma de observación más alta del mundo occidental. Esto requería una sólida combinación de vidrio que también reduce los reflejos, maximiza la transmisión de la luz y es casi incoloro. El vidrio está muy presente; aun así, es imperceptible.
El nuevo centro para la salud y el bienestar de la universidad de Carolina del Sur necesitaba combinarse con el campus, ser llamativo para las personas y ayudarlos a sentirse relajados en su interior. El vidrio de alto rendimiento de Guardian ayudó a lograr todo esto conectando el edificio con el paisaje natural exterior, a la vez que ayudaba a proteger a los que están dentro del intenso calor de Carolina del Sur.
¿Cómo haces que el diseño de un famoso jarrón de cristal de los años 50 se transforme en un edificio emblemático de 170 metros en el corazón de Londres? ¿Un diseño admirado por cómo cambió dinámicamente en función de la luz? Con una avanzada fachada de vidrio con bajo contenido de hierro de Guardian y un modelado muy complejo del vidrio curvo.
Aquí, los materiales de origen local y los principios de diseño tradicional del rancho se combinan con el vidrio de alto rendimiento de Guardian para crear un refugio construido de manera sostenible a partir del sol de Texas. Con sombreado de porche colgante y vidrio que ofrece una baja ganancia de calor solar y altos niveles de transmisión natural de la luz, La tradición y la innovación van de la mano.
Con una altura de aproximadamente media milla (828 metros), el Burj Khalifa es la estructura más alta del mundo. El vidrio de Guardian no solo soporta velocidades de viento de hasta 155 mph (249 km/h) y un balanceo lateral de hasta 2,7 yardas (o 2,5 metros), sino que también ayuda a regular la temperatura, que puede ser 59 °F (15 °C) más fría en la parte superior que en el suelo. Y hace todo esto en 24 348 ventanas.